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miércoles, 24 de febrero de 2016

Rebanada de mantequilla

Todo con mantequilla sabe mejor.
Se la ponemos a todo: Elotes, hot cakes, molletes, spaghetti, pescados y mariscos, o sencillamente untada en una rebanada de pan.
La mantequilla es un invento antiquísimo. Es muy posible que una agitación accidental de la crema de leche diera lugar a la mantequilla; quizás en el área de Mesopotamia entre el 9000 y el 8000 a. C. La primera mantequilla pudo haberse elaborado de leche de oveja o cabra que en aquella época ya se domesticaban. Los métodos antiguos para la elaboración de la mantequilla se emplean aún hoy en día en algunas partes de África y en Oriente Próximo.

Lo cierto es que hoy en día la repostería y la cocina en general no serían nada sin este maravilloso producto lácteo.Como se la ponemos a todo, era natural que muchas piezas de pan dulce la trajeran como parte de sus ingredientes. 
En este enharinado blog hemos visto pasar a la Perla y su cubierta de mantequilla y azúcar o el mollete o cazuela que lleva mantequilla derretida.
Hoy toca hablar de una de las piezas de pan dulce más populares que existen, la rebanada de mantequilla. No puede haber una pieza de pan más atractiva que está, por su sencillez y carisma. Es simplemente un bizcocho rebanado untado con mantequilla y azúcar.
Listo, nada mas.
De niño yo la tenía prohibidisima porque argumentaban las autoridades maternales que la mantequilla era pura grasa y que ningun beneficio habría de traerme su consumo.
Dado que durante mucho tiempo no la pude probar, se convirtió para mi en una leyenda, una especie de santo grial que cuando por fin pude degustar se convirtió en una experiencia sin igual.
Naturalmente hoy en día es de mis piezas favoritas, aunque efectivamente la reservo para ocasiones especiales ya que su consumo si es una rica fuente de lípidos y carbohidratos.
Su textura suave y cremosa se combina de maravilla con el propio bizcocho haciendo de cada bocado una experiencia sublime.
Esta pieza es altamente proclive a ser consumida asi solita pero sopeada en café con leche es una cosa sobresaliente.
Este suculento pan afortunadamente se consigue por todas las panaderías de la ciudad de México sin ningun tipo de esfuerzo.


Esta es una Rebanada de mantequilla

martes, 16 de febrero de 2016

Vidrio

Placas de vidrio
El vidrio ha formado parte de la historia de la humanidad desde tiempo inmemorial. Como siempre, ha de haber sido algún tipo de accidente en una hoguera lo que le permitió descubrir al hombre que las piedras de carbonato de sodio se fundían y reaccionaban con arena para producir un material duro y brillante, el vidrio.
Los egipcios hacían todo tipo de objetos de vidrio como vasijas y joyería por allá en el 1500 a.c
Y para la edad media el vidrio ya era común en ventanas de casas y carruajes.
En territorio mexicano aun cuando poseían sustancias para su elaboración, como sílice, óxidos alcalinos y cal, nuestros antepasados indígenas no fabricaban vidrio. Sólo se admiraban ante los minerales cristalinos por naturaleza, que se parecían al vidrio en aspecto y transparencia, pero que eran muy distintos en su dureza y en la forma de trabajarlos.
El único vidrio utilizado por nuestros antepasados antes de la Conquista fue el vidrio volcánico oscuro, llamado por los tarascos tzinapu, por los mexicas itztli, y por nosotros obsidiana.
Fue el español Antonio de Espinosa el primer vidriero de México. En 1542 estableció un obraje en la calle del Venado, en Puebla, y su taller fue el único de la Nueva España durante mucho tiempo pues incluso exportaba parte de su producción a Perú y Guatemala.
Mucho tiempo mas tarde el desarrollo de industrias como la cervecera instaron a la proliferación de la industria del vidrio para la fabricación de botellas.
Asi mas o menos ha sido la historia de este formidable material el cual sigue produciendo objetos maravillosos tanto tecnológicamente modernos como bellamente tradicionales.
Trabajando el vidrio soplado
En Tlaquepaque Jalisco siguen existiendo varios talleres que afortunadamente siguen trabajando el vidrio soplado. 
El vidrio forma parte de nuestras tradiciones en todo tipo de artesanías y en nuestras frases.
¡Ahi los vidrios!
Y un vidrio más que nos interesa explorar es el de apastelado.
Ya hemos visto que esta masa es especial pues parece ser que es invento nacional. Por sus características crocantes y quebradizas era evidente que tarde que temprano algún panadero le iba a encontrar las similitudes con el vidrio. Bastaba con dotar a la pieza de forma de laja o lámina para que naciera el vidrio como pieza de pan dulce.
Esta pieza es hermana de la almohada, de la paloma y la tabasqueña pues todas están elaboradas con masa de apastelado, lo único que cambia entre estas piezas es su forma.
No es una pieza tan fácil de conseguir ya que la masa de apastelado no la suelen preparar en todas las panaderías y cuando lo hacen prefieren utilizarla en preparar ojos de buey o palomas que son mas populares.
Acompañado de una buena taza de café negro sin azúcar el vidrio es un manjar.


Este es un vidrio

miércoles, 3 de febrero de 2016

Carioca

La relación entre México y Brasil siempre ha sido muy afectuosa. Nos sabemos hermanos, en el peor de los casos primos lejanos.
Nos une la pasión por la fiesta, por el carnaval, la música, el baile, las mujeres bellas, los latin lovers y naturalmente, el fútbol.
Por supuesto que al ser los dos países economías emergentes americanas, hemos estado en plena competencia durante mucho tiempo, aunque en realidad Brasil si es un motor impulsor de la economía sudamericana mientras que México siempre ha dependido de la economía gringa para sobrevivir. 
En ese aspecto somos muy diferentes.
Nos separa también el idioma, aunque portugues y español sean muy parecidos, al ser lenguas romances, y ahí entre señas y mímica nos logramos entender bastante bien. 
De todas formas creo que hay más puntos de encuentro que de desencuentro.
El Pato Pascual, Pancho Pistolas y José Carioca
Desde aquella icónica película de Walt Disney, Los tres caballeros de 1944 en la que el Pato Donald visita Brasil y México para llevar un mensaje de unión a toda América, (entre otras cosas para evitar que le entráramos a la segunda guerra mundial del lado que lo le conviniera a los gringos). Esta pelicula nos regaló a los mexicanos y a los brasileños dos personajes entrañables en José Carioca y en Panchito Pistolas que yo estimo mucho y que creo son verdaderos simbolos de la amistad entre ambos países.  

Por otro lado, es innegable que uno de los temas que más nos une y que curiosamente también nos confronta de vez en cuando es el fútbol.
Esta mas que claro que México jamás podrá alcanzar a Brasil en logros futbolísticos, eso es innegable, sin embargo en fechas recientes empieza a nacer una rivalidad interesante entre ambas selecciones. 
Tal vez sea por que México ha conseguido algunos logros importantes en categorías menores y en Juegos Olímpicos donde Brasil nunca ha puesto mucho interés, y sin duda se debe a que la selección de México siempre juega a tope cuando se enfrenta a Brasil buscando ganarle a como de lugar. 

De todas formas la historia de México y Brasil en el futbol tiene muchos puntos de encuentro que generan gratos recuerdos.
El cabo del gol. Evanivaldo Castro "Cabinho"
El Mundial de México 70 que dicho sea de paso no me tocó vivir pa' que quede claro que estoy ruco pero no tanto, genera un grato recuerdo entre los aficionados ya que según los expertos fue el último mundial ganado por Brasil en el que realmente hubo magia en el juego al mejor estilo brasileño, el famoso jogo bonito.     
Por otro lado el máximo anotador de la liga mexicana aún sigue siendo un brasileño, en la figura de Evanivaldo Castro "Cabinho" que militó en Los Pumas de la Universidad, en el Atlante, el León y Tigres y que metió 312 goles y consiguió ocho títulos de goleo. 
Cabinho es el máximo romperedes de la UNAM con 151 goles y del Atlante con 108. 

Un verdadero jugadorazo.

Pero dejemos de hablar de futbol que ni es el lugar ni el momento y veamos que de Brasil hemos obtenido muchas otras cosas increíbles como la Samba y la Bossa Nova. 
De Brasil hemos heredado a Roberto Carlos, Carmen Miranda, Caetano Veloso, y a Nelson Ned. 
La prodigiosa feijoãda y las espadas con esa maravillosa piña al carbón son todos deliciosos platillos brasileños que afortunadamente son fácilmente encontrables en México.
Y bueno que podemos decir de la belleza brasileña encabezada por Morena Bacarin, Giselle Bundchen, Adriana Lima o Alice Braga. ¡Wow!
beleza brasileira
Pues bien dentro de toda esa tradición cultural que compartimos con los brasileños existe una pieza de pan dulce mexicano que por su colorido y aspecto festivo no podía llamarse de otra manera mas que "carioca".
Sencillo y carismatico, este pan no es más que una rebanada de bizcocho que está partida por la mitad y untada con mermelada. Su cubierta es betún blanco como de pastel de fiesta y todo va cubierto de chochitos de colores. 
Aquel panadero que haya bautizado esta pieza le atinó bastante bien al nombre pues entre el colorido y combinación de sabores esta pieza es un verdadero carnaval. 
Es una pieza muy dulce por lo cual siempre será bien acompañada de un buen vaso de leche fría.
Esta es una pieza que no todas la panaderías ofrecen pero que puede ser encontrada mas o menos con cierta facilidad en las panaderías más grandes de la ciudad. 

Esta es una carioca.